La Justicia sospecha que el dinero pudo haber tenido un origen ilícito. La hija de Cristina y Néstor Kirchner escribió una extensa carta en las redes sociales.
La Justicia embargó hoy más de cinco millones de dólares que Florencia Kirchner, hija de la ex presidenta, tenía depositados en una caja fuerte y caja de ahorro, por entender que hay elementos para sospechar que el dinero pudo haber tenido un origen ilícito y habrían querido ser protegidos cuando la ex jefa de Estado fue citada a indagatoria en la causa de “dólar futuro”.
Se trata de los 4.664.000 dólares que había en una de las dos cajas de seguridad de la casa central del Banco Galicia (la otra estaba vacía) y del contenido en dos cajas de ahorros: una con 1.032.144,91 dólares y otra por 53.280,24 pesos.
Mientras, Florencia Kirchner escribió una carta, difundida en las redes sociales de su madre, en donde rechazó las acusaciones y afirmó: “Sacan denuncias de la galera para tapar su propia corrupción y catástrofe económica y social”.
Además, la defensa de Cristina Fernández denunció al Ministerio de Seguridad y la Gendarmería, por la difusión de las fotos en donde se veían los fajos de dólares encontrados en la caja fuerte.
Todo surgió tras el procedimiento realizado en la noche del jueves en la sede de la calle Perón al 400, en la casa matriz del Banco Galicia, por orden del juez Ercolini y a pedido de la propia Florencia Kirchner que invitó a inspeccionarlas y terminar el “show mediático”.
Fue una semana después de que la diputada Margarita Stolbizer reportara movimientos extraños en las cuentas bancarias y de seguridad de la familia Kirchner, hecho que derivo en que la ex presidenta la tratara de burra y la denunciara en la Justicia penal y civil.
En el procedimiento hecho en el subsueldo del Banco Galicia, se encontraron con que una de los cofres estaba vacío y del otro no estaba la llave, por lo que hubo que llamar a un cerrajero mediante que logró abrir el contenedor: habían tres bultos con 4.664.000 billetes fajados.
“Mirá todo lo que tiene esta mina con tanta pobreza que hay en la calle”, dijo Cristian Medina, el convocado para abrir la caja.
Hoy, el fiscal Gerardo Policita y su colega Ignacio Mahiques presentaron un dictamen en donde solicitaron el embargo del dinero encontrado, al recordar las causas que salpican a la ex presidenta y su familia.
“La presente causa tiene por objeto determinar si Néstor Kirchner, Cristina Fernández de Kirchner, y sus hijos, Florencia y Máximo Kirchner, resultaron beneficiarios en forma sistemática y coordinada de los pagos que los empresarios favorecidos por el Estado Nacional habrían realizado a favor de ellos, vía el alquiler de los complejos hoteleros de su propiedad y la falsa contratación de habitaciones, lo que les habría permitido, valiéndose de un entramado societario, otorgarle carácter legítimo al dinero obtenido -en gran medida- a través de la ilícita concesión de obra pública en perjuicio del erario público”, señalaron.
Asimismo, los fiscales sostuvieron que el pedido de embargo “se sustenta no solo en que la nombrada tendría una comprobada participación en el entramado societario que se habría utilizado para canalizar fondos de procedencia ilícita, sino que a ello se debe sumar que -cuanto menos- parte del dinero hallado en su esfera de custodia se lo habrían proporcionado, en diferente carácter y circunstancia, sus progenitores”.
Los fiscales recodaron las causas abiertas contra la ex presidenta y su familia, y también la investigación por la operatoria de dólar futuro por la que el juez Claudio Bonadio citó a indagatoria a la ex jefa de Estado en los últimos días de febrero.
Al respecto, el dictamen remarcó que la apertura de las cajas de seguridad a nombre de Florencia Kirchner se concretó el 3 de marzo de 2016, “solo cuatro días hábiles posteriores a que su madre, Cristina Fernández de Kirchner, fuera convocada por el Dr. Claudio Bonadio a prestar declaración”.
Y remarcó que “el detalle de movimientos de las cuentas en dólares registradas por las nombradas en el Banco Galicia revelan como entre los días 3 y 4 de marzo -previo realizar una importante operación de cambio de divisas por U$S 1.696.202,00 desde la caja de ahorro en pesos de Cristina- se extraen en efectivo un total de U$S 4.664.000 y los mismos son depositados por la propia Florencia en las cajas de seguridad a su nombre con una intención que no habría sido otra que la de evitar que sean cautelados”.
A criterio del Ministerio Publico, “teniéndose por demostrado el despliegue de maniobras de parte de las personas investigadas con el objeto de evitar que la justicia detecte importantes sumas de dinero, deviene indispensable la adopción de medidas de naturaleza patrimonial con miras a asegurar las responsabilidades emergentes del proceso en curso”.
El juez Ercolini entonces hizo lugar al embargo solicitado, al entender que era “oportuno, pertinente y conducente al caso” y delego en el tesorero del Banco Galicia la responsabilidad de custodiar el dinero.